Fundada en 1926 por Jens Reidar Larsen, esta casa de coñac es símbolo de calidad, experiencia y compromiso con la tradición. La historia familiar es una pasión transmitida de generación en generación.
Jens Reidar Larsen, el fundador, era un explorador noruego que se enamoró de la región de Cognac durante sus viajes. Fascinado por el arte de crear coñac, estableció su propia destilería en Cognac en 1926, creando la Maison Larsen. La pasión de Jens Reidar por el Cognac y su compromiso con la calidad sentaron las bases de lo que se convertiría en una marca de renombre internacional.
La Casa ha mantenido su carácter familiar a lo largo de las décadas, con la quinta generación de la familia Larsen al frente. Esta continuidad familiar es un elemento clave de la filosofía, ya que cada generación se compromete a preservar el patrimonio al tiempo que busca innovar y mejorar constantemente la calidad de sus coñacs.
La especialidad de la Casa reside en sus excepcionales coñacs. El Domaine está situado en la región de Grande Champagne, uno de los crus más prestigiosos de Cognac. Los viñedos se benefician de un terruño único, con suelos calcáreos que contribuyen a la riqueza aromática de las uvas. Esta riqueza se traduce en coñacs finos y elegantes, famosos por su complejidad y equilibrio.
La Casa hace hincapié en su compromiso con la calidad y la innovación. La gama de Cognacs incluye una gran variedad de expresiones, desde Cognacs clásicos a creaciones contemporáneas, testimonio de la capacidad de la Casa para adaptarse a la evolución de los gustos de los consumidores, manteniendo al mismo tiempo la calidad y la tradición.
